Incautación de precursores químicos.
En el norte de Chile se llevó a cabo una incautación histórica: 146 toneladas de precursores químicos como carbonato de sodio y acetato de etilo. Estos químicos, que venían de Hong Kong y Panamá, estaban destinados a Bolivia y se usaban para fabricar drogas como la cocaína. Toda la operación fue un esfuerzo conjunto de la Fiscalía de Arica, Aduanas, la PDI y la Armada. Detectaron las sustancias en puertos de Arica e Iquique, ocultas bajo nombres como “base para detergente”. Según el fiscal nacional Ángel Valencia, esto evitó que llegaran más de 80 toneladas de cocaína a las calles. El funcionamiento de estas redes de crimen organizado demuestra cómo intentaban evadir controles aduaneros para transportar estas sustancias a Bolivia, usando empresas de transporte marítimo.