Desacuerdo en comisión que busca la paz en el sur de Chile.
El gobierno había creado un grupo especial, la “Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento”, para buscar soluciones al histórico conflicto por tierras con las comunidades mapuche en el sur del país. Después de casi dos años de trabajo, esta comisión terminó sus propuestas. Sin embargo, no hubo acuerdo total: aunque ellos mismos se pusieron la regla de que todos debían estar de acuerdo (unanimidad), uno de los ocho miembros votó en contra. Este integrante es Sebastián Naveillán, representante de los agricultores de Malleco, quien rechazó el plan principalmente por la propuesta de entregar grandes cantidades de tierra (unas 240 mil hectáreas). Naveillán cree que esto pone en riesgo la producción de alimentos, genera problemas legales y es muy caro (unos 4 mil millones de dólares), sin un plan financiero claro. También critica que el documento no condena firmemente la violencia, llamándola solo “violencia rural”, y que crea divisiones injustas.
Como no hubo unanimidad, algunos políticos dicen que el informe no es válido y no debería entregarse. A pesar de esto, la comisión decidió enviar igual las recomendaciones al Presidente Gabriel Boric, destacando que la mayoría (7 de 8) sí estuvo de acuerdo. Este desacuerdo también generó tensiones políticas: la senadora Carmen Gloria Aravena, que participaba en la comisión, votó a favor de las recomendaciones. Su partido político, el Partido Republicano, la presionó para que votara en contra. Como ella se negó, terminó renunciando al partido, diciendo que su compromiso era con su región, La Araucanía, y que la propuesta era un avance. Así, el plan sigue adelante, pero la polémica y las divisiones son evidentes.